Ha muerto André Green
Ya no nos desconcertará con sus punzantes señalamientos, ya no nos cuestionará nuestras concepciones o nos sacudirá de nuestra complaciente comprensión.
Su combate, su esfuerzo por un psicoanálisis viviente, por ese dialogo intenso y comprometido, su comprensión de las locuras privadas o de esa clínica psicoanalítica contemporánea y esencial, ya no podrá acentuarla y defenderla.
Es ahora una tarea nuestra.
Un intelectual deja una herencia intelectual, sigue vivo y combativo, pero su voz esta ahora en otros. Sus discípulos, sus lectores y disidentes, le dan vida, nuestra ciencia y todas las demás trabajan y debaten un legado de quienes ya no están físicamente presentes. Tiene vida su pensar y ese diálogo interru mpido que intentaremos suplir.
¨Cuantas posibles vidas se abran ido
En esta pobre y diminuta muerte
Cuantas posibles vidas que la suerte
Daría a la memoria o al olvido.¨
¨Cuando yo muera morirá un pasado
Con esta flor un porvenir ha muerto¨ J.L. .BORGES
Quizás la muerte sea lo que le sucede a otros, y que en el inconsciente solo exista la inmortalidad, pero en cada perdida significativa, algo de un mas allá parpadee y nos reenvié a esas angustias y a esas pérdidas esenciales que suceden en una disciplina que mas que otras es un discurso viviente y compartido.
Hoy hemos perdido la riqueza que emana de las posibles perspectivas y concepciones que produce un creador, un luchador intelectual, que es siempre un interlocutor privilegiado.
Y gracias a André por la vida que has producido y el saber que nos brindaste.
Andrés S. Rascovsky
Presidente APA